Turquesa

La turquesa es una piedra antigua, sagrada para muchas culturas, y sigue siendo hoy una de las aliadas más potentes para quienes están listas para abrir su voz, sanar el pasado y expresarse desde el alma.

Es un puente entre el corazón y la garganta ya que te ayuda a decir lo que sientes, sin miedo al juicio ni a ser “demasiado sensible”. Su energía es protectora, suave y profundamente liberadora.

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¿Para qué sirve la turquesa?

• Equilibrar el chakra garganta y liberar bloqueos en la comunicación.

• Sanar emociones reprimidas o que quedaron sin expresar.

• Calmar la ansiedad y volver a un estado de serenidad interior.

• Reconectar con tu verdad y expresarla con amor.

Cuidados físicos

• Evita exponerla al agua.

• No aplicar perfumes ni cremas directamente sobre la piedra.

• Guárdala en una bolsita suave o en un espacio limpio, lejos de otras piedras más frágiles.

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Limpieza energética

• Pásala por el humo de un sahumerio, palo santo o incienso.

• También puedes dejarla en sal marina seca durante una noche (sin agua).

• El sonido de cuencos o campanas también ayuda a limpiarla.

Intencionar tu piedra

Sostén la joya con ambas manos, apóyala en tu garganta o pecho y repetí mentalmente:

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🕯️ “Mi voz es medicina. Me permito expresar mi verdad con claridad, amor y presencia.”

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¿Para quién es esta piedra?

Para quienes sienten que se callaron por demasiado tiempo.
Para mujeres que están trabajando su voz, su verdad y su merecimiento.
Para quienes desean hablar desde el alma y sanar desde el cuerpo.

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